lunes, 25 de marzo de 2013

SALVADOS A OXTIAS...



El aburrimiento monumental que sufrían unos cuantos chavales de Aguraín, Salvatierra, da como resultado la formación de uno de los grupos capitales del punk hispanohablante. Poco pensarían estos mozos que, tras dar sus primeros conciertos en la discoteca del pueblico, llegarían a convertirse en grupo indispensable y mítico, capaz de abarrotar escenarios a ambos lados del charco.

Para mítico, dentro de su discografía, su primer larga duración, "Salve". Grabado en los estudios Tsunami, para Soñua, sello discográfico navarro de los hermanos Goñi.  Vale que por aquellas tierras ya habían grabado Barricada, Hertzainak y Zarama, pero podemos considerar "Salve", junto al "Zona Especial Norte" grabado a medias por R.I.P y Eskorbuto, como el pistoletazo de salida de la hornada punk que azotó el Pais Vasco a principios de los ochenta.

19 cortes forman el disco, en los que no se deja títere con cabeza. El disco suena limpio y contundente, sin concesiones, enérgico y vacilante, con espacio para los ritmos más anfetamínicos y salvajes como "venganza", "porno en acción", "tu alucinas"; ritmos más pausados y contenidos , "El 7º de Michigan", "revistas del corazón"; e incluso se atreven con el acercamiento al reggae en "Tope Bwana".

Las letras, un fabuloso entramado de ironía sangrante, en las que pilla todo cristo. Desde la propia iglesía católica y uno de sus lamentables brazos ejecutores, el Opus Dei; la economía mundial, las revistas del corazón, la policía, cualquier método de ilusionista salvación... Hasta el propio punk , del cual formaban parte pilla en el disco...

Aún siendo el primer largo de la banda, goza de un sonido limpio, grabado con una batería electrónica como aquel otro gran clásico de Eskorbuto, esquizofrenia. Aparece en algún corte también, alguna sección de vientos y corte de sampler. La voz de Evaristo se presenta aveces como un adolescente chillón y la mayoría de ellas como un tipo garraspeando apunto de escupirte en la cara o echarte una pota al pie. Todo un logro de identidad personal de alguien que, según él,  quería hacer un tono mezcla de Johnny Rotten y Jello Biafra.

La primera vez que escuché el disco completo, era una cinta prestada, en la que estaba por un lado el salve y en la otra cara canciones del primer disco de pabellón psiquiátrico... Si es cierto, en esos tiempos parecía que la gente hacía cosas muy raras. El primer corte, venganza, entró en mi cabeza como un tiro de mala leche y desesperación, no lo llegué a entender en aquellos tiempos de chinorri. Unos cortes más adelante aparece Delincuencia y después de su escucha, ya entendí aquella primera canción y el mensaje rabioso de saber, quien es el verdadero delincuente, aunque esté tan bien situado, en una sociedad tan miserable e hipócrita como la que nos hacen comer. Los siete enanitos, he de confesar, que era la canción que más escuché de aquella cinta... Sigue sonando el radiocassette y aparece la canción más larga del disco, Salve, toda una revelación para cagarse en Dios y, sobre todo, en los representantes de éste en la tierra. Aparece come mierda, canción echa por y para corear y tararear aunque no quieras. De pronto el 7º de Michigan y mi flipaera particular por que sabía tocarla a la guitarra... Con revistas del corazón, de base vacilona rockera, nos acercamos al txus (tantas y tantas veces gargajeadas en mis primeras reuniones etílicas), que cerraba el disco para decirnos, que aunque lo que nos rodea es un mojón, aquí estamos cuatro días y debemos gozarla y saborear...

Mención aparte merece en mi opinión, una canción que no siendo uno de sus más grandes y sonados clásicos, como puedan ser "Salve", "Txus", "Estrella del Rock"... sea una de las más logradas del disco. Esta canción es, "Nuestra alegre juventud", que se presenta como un canto generacional en toda regla, de una juventud inconformista, cabreada y nihilista. Todo un reflejo de aquellos chicos de las calles en esos salvajes ochenta...

A casi treinta años después de registrar Salve, parece que poco o nada ha cambiado. El Opus Dei sigue presente en la esfera social dando por culo, la policía sigue repartiendo oxtias, el 7º de Michigan nunca dejó de tratar a Tope Bwana y  pronto  ocupará otra colonia (Irán tal vez... ) y los verdaderos delincuentes siguen vistiendo traje y corbata, montando en yates y comiendo mariscadas, pagadas por los sueldos de esas nóminas que han dejado de llegar a los trabajadores...

....Realmente tíos, nunca he visto religión, que pretenda tanto, salvarnos a oxtias...


LA POLLA RECORDS - SALVE - 1984


Revistas del corazón:



Adentrándose, hacia una Euskadi tropical, "Tope Bwana":



La apertura del disco con "Venganza", aquí desde el mítico concierto de las ferias de San Isidro, allá por el Madrid de 1986:



Y con "Txus" cerramos el disco:




miércoles, 6 de marzo de 2013

CORAZÓN VENENOSO...


1989, final de una década y tiempos de cambios para los protagonistas de este post. Stiv, después de pasar por los Dead Boys, formaba parte de los geniales Lords of the New Church, junto a Brian James de Damned y Dave Treguna de Sham 69 entre otros. Ese año se hirió la espalda y Brian publicó en la prensa un anuncio a escondidas para buscar cantante. La disolución del grupo se produjo mientras, en el último concierto de la banda, Stiv apareció con una camiseta con el estampado del anuncio del periódico y llamando traidores a sus compañeros de proyecto.

Johnny Thunders, se encontraba en su momento compositivo más bajo, haciendo algunas colaboraciones con algunos compañeros y de vuelta de una gira por Japón, donde su principal objetivo era lograr mantenerse en pie, debido a sus problemas de salud ocasionados por su constante devenir vital, del ejercicio del "me quito, me pongo, me vuelvo a poner..."

Dee Dee Ramone, grabó ese mismo año su último disco con los Ramones, "Brain Drain". Cansado de la vida en esa "familia feliz", que parecía no serlo, cansado de su peinado cacerola y de vestir pantalones rotos y chupa de cuero, experimento con el Rap, bajo su alter ego Dee Dee King.

Tras esta serie de echos, Stiv se mudó a Paris y se le ocurrió la genial idea de crear un grupo, juntando a pesos pesados del Nueva York de los 70. El proyecto se llamaría "The Whores of Babylon" y contaría con la participación de Dee Dee Ramone y Johnny Thunders. Al ponerse en contacto con ellos, le invitó a hacer las maletas y refugiarse en París donde tenían casa , la compañía, el estudio y los medios... Todo listo para emprender la aventura.

Alguna que otra sesión de ensayo y alguna que otra composición... Todo se fue al garete a raíz de una brutal riña entre Dee Dee y Johnny. Según algunas declaraciones de personas que estuvieron presentes aquellos días, recogidas en el fabuloso libro "Por Favor Mátame", entraron en juego las drogas... Parece ser que Johnny robó algunos de los enseres, de los habitantes de la casa, entre ellos, el abrigo de Dee Dee. El Ramone, abrió la maleta de Thunders cuando no estaba  y encontró algunas de las cosas de los presentes, entre ellas su abrigo. Montó en cólera y destrozó toda la ropa de éste...  cogió la Gibson Sunburst del 57 de Johnny (lo que era toda su vida), y la destrozó. Una vez calmado un poco el ambiente se tomó un avión a Nueva York, con Dee Dee y su novia en él, antes de que el Heartbreaker descubriera todo el pastel. De vuelta en Nueva York, Johnny partió una jarra de cerveza en la cabeza del Ramone y así se zanjó el problema, un proyecto no realizado, alguna enorme composición y sobre todo, como cantaban los Heartkreakers: " Too much, Junkie Business..."

Las canciones quedaron y se sumaron otras tantas que Stiv  grabaría después con algunos miembros de Sigue-sigue-Sputnick. El disco se editaría póstumamente en 1996 con el nombre Last Race. El disco se me antoja un tanto irregular, con enormes composiciones y otras no tanto, pero ahí quedó, como el reflejo de algo que se quedó a medias pero que merece ser recordado. Contiene dentro temas como el enorme Poison Heart, Two Hearts o Magyc, cantadas por el  desgarrador y siempre expresivo tono vocal de Stiv, que si bien se manifiesta en mi humilde opinión, altamente triste y melancólico, deja trasmitir un tono de vitalidad marca de su casa.

Meses después de esta reunión, dos de estas putas de babilonia, morirían. Johnny, aunque en misteriosas circunstancias, se dice que murió de sobredosis de heroína, (causa a la que se unió Dee Dee poco después de ingresar en el Salón de la fama del Rock and Roll). Stiv murió de manera inverosímil. Su muerte no estuvo directamente relacionada con el consumo de estupefacientes, como bien se podría intuir, sino que fue atropellado por un coche en París, fue al médico y le dijo que no tenía lesiones, volvió a casa con su novia , se fue a dormir y murió mientras dormía.



STIV BATORS - LAST RACE - 1996


Una balada desgarradora, también grabada por los ramones:



Two Hearts:



Dee Dee King y "Funky Man":


Johnny Thunders, You Can't Put Your Arms Round A Memory: